Con celebraciones espectaculares y de diferente tipo, la humanidad despidió el año 2023 y le dio la bienvenida al 2024. Las primeras imágenes de la celebración, fueron difundidas en las distintas redes sociales, informando en tiempo real la forma en que los países de Nueva Zelanda y Australia recibieron el nuevo año.
LO QUE TRAE CONSIGO EL 2024
Por Armando Maya Castro
Con celebraciones espectaculares y de diferente tipo, la humanidad despidió el año 2023 y le dio la bienvenida al 2024. Las primeras imágenes de la celebración, fueron difundidas en las distintas redes sociales, informando en tiempo real la forma en que los países de Nueva Zelanda y Australia recibieron el nuevo año.
El regocijo se extendió a los países que horas después recibieron el año nuevo con la esperanza de que en los próximos 365 días las cosas sean mejores en todos los sentidos: más entendimiento y diálogo, y menos guerras.
El mundo espera el fin de las guerras que se libran en diferentes regiones del mundo; espera también la disminución de la inseguridad y violencia que afectan a varias naciones de la tierra, entre ellas nuestro querido México.
Los deseos de prosperidad, éxito y bienestar se han expresado en todo el planeta desde que el reloj marcó el inicio del nuevo año. A la par de los buenos deseos hacen también su aparición al filo de la medianoche varias creencias, rituales, supersticiones y tradiciones: la de tomar doce uvas para tener buena suerte en cada mes; beber cenizas de papel quemado para tener salud y prosperidad; brindar con champagne entre familiares y amigos para atraer la felicidad; generar fuertes ruidos al inicio del año para ahuyentar a los malos espíritus, entre otras supersticiones que muchos no comparten por considerarlas estrafalarias.
Lo único cierto es que todos queremos lo mejor para nuestros semejantes, y principalmente para los amigos y familiares. Aunque si los buenos deseos y las supersticiones fueran determinantes para atraer bienestar, amor, dinero y abundancia, el mundo no estaría como se encuentra actualmente, con problemas económicos, menores expectativas de crecimiento, inseguridad y desempleo, porque los buenos deseos se han expresado en todo tiempo.
La inmensa mayoría de los seres humanos anhela el fin de los conflictos Rusia-Ucrania e Israel-Hamas, no sólo por el sufrimiento y muerte que estos provocan a diario, sino también por la repercusión multiforme de la guerra en todas las regiones del mundo, principalmente en la región en conflicto.
Respecto a lo que le espera a la economía global en 2024, un artículo del diario estadounidense The New York Times señala que las heridas que las guerras y otros factores le han ocasionado a la economía global, pueden agravar este año la inestabilidad financiera en todo el mundo, incluidas también las grandes economías.
En el caso específico de México, algunas voces aseguran que el 2024 será complicado para la economía mexicana, por lo que no podemos atenernos a las supersticiones y buenos deseos, sino afrontar la difícil cuesta de enero y los demás
meses del año con inteligencia, austeridad y trabajo. Sólo así podremos salir bien librados de los problemas que se nos vienen.
X: @armayacastro